domingo, 21 de septiembre de 2008

DÍAS BLANCOS DE PRIMAVERA


Días blancos de primavera,
despertar con el verde que brotó,
ya viene el perfume a darte un soplo veloz.
Días blancos de primavera,
este azul va a llevarse tu dolor
más lejos que el frío, a algún helado rincón.
Días sin paz, ya no habrá más días sin paz,
si ya te ahogaste de llorar,
si ya lavaste a nuevo el alma,
vuelta a brillar, suelta tu mal, vuelta a brillar.
Días blancos de primavera,
flor abierta que todo espera dar (dar, dar)
al pedirte apenas que la quieras mirar (quererla mirar).
Vuelta a brillar, suelta tu mal, vuelta a brillar
porque el invierno volverá.
Hoy día es tiempo de tibieza,
d ía de sol sea este hoy día de sol.
No insistas en mirar atrás
que un día, pronto, el día se helará.
Cada día de primavera,
cada pétalo lleva una canción (lleva una canción de amor)
que preparó cuando el frío ahogaba su voz (cuando el sol se heló).
Día de sol sea este hoy día de sol,
si ya te ahogaste de llorar (basta de llorar),
si ya lavaste a nuevo el alma,
d ías de amar, días de dar, días de amar.
Días blancos de primavera,
guarda el fruto este blanco azahar de hoy.
Que brille la vida entera en primavera,
dentro y fuera vuelve el sol.

Pedro Aznar

PRIMAVERA ESENCIAL


Bienvenida otra vez
primavera esencial
con el ritmo a tus pies
¡hoy los vuelvo a encontrar!
Hay un lugar
donde los pájaros van
a conversar
con caracoles del mar.
Bienvenidos otras vez,
soy septiembre a tus pies.
Ya nos conocemos muy bien,
soy las flores y el Edén.
Hay un lugar...
Si me ves, como siempre en septiembre
di tu nombre
y llamaré a tu puerta.
Si me ves, como siempre en septiembre
yo soy, soy esa flor.
Bienvenida...
Hay un lugar...
Hay un lugar
donde el perfume está,
con sólo respirar
uno puede hallar,
uno puede hallar.
Es un lugar...
¡Oh! Primavera esencial, es un lugar.


Man Ray

PRIMAVERA

Lluvia de sol
Como Una Bendicion
La vida renace con su luz
La primavera ya llegó.
Todo es así
Regreso a la raiz
Tiempo de inquieta juventud
En primavera ya.
La tierra negra se vuelve verde
Y las montañas y el desierto
Un bello jardín.
Como la semilla
Lleva nueva vida
Hay en esta primavera una nueva era.
En el aire de este nuevo universo
Hoy se respira libertad
En primavera ya.
La tierra negra se vuelve verde
Y las montañas y el desierto
Un bello jardín.
Como la semilla
Lleva nueva vida
Hay en esta primavera una nueva era.

Santana

Las Flores De La Primavera Salen


Las flores de la primavera salen,
como el apasionado dolor del amor no dicho;
y con su aliento, vuelve el recuerdo de mis canciones antiguas.
Mi corazón, de improviso, se ha vestido de hojas verdes de deseo.
No vino mi amor, pero su contacto está en mi cuerpo
y su voz me llega a través de los campos fragantes.
Su mirar está en la triste profundidad del cielo, pero
¿dónde están sus ojos? Sus besos zigzaguean por el aire,
pero sus labios, ¿dónde están?

Rabindranath Tagore

NIEVE EN PRIMAVERA


A sómate a la ventana: llueven rosas,
mariposas quizás revolotean, construidas
en las aéreas estancias de lo Alto;
nacidas allá arriba, donde nuestros deseos
y esperanzas, al subir, sucumben.
¿Te acuerdas de la Vía Láctea en el verano,
que deja pasar la luz de la puerta del palacio
de los dioses, como si estuviera mal cerrada?
Por allí ha debido de bajar esta hermosura,
porque quizás los dioses celebran una fiesta
y envían
tal regalo nupcial hacia la tierra.

JOSE GIMENEZ LOZANO

ANUNCIO DE PRIMAVERA


Mi vida está hecha de noches,
de lágrimas de estrellas,
de lunas frías y silenciosas.
Como un ángel de las tinieblas
se acostumbraron mis ojos a las calles oscuras,
a la penumbra de los bares,
a la luz, de neón, artificial.
Gentes, recién llegadas de la tarde,
aseguran que volvió la Primavera
y en mi ropero sólo hay trajes negros,
presentimientos negros,
máscaras de amargura.
Señora de los Cielos Luminosos,
cuando no sea un maldito
me haré unas alas
-como Ícaro-
e intentaré volar al sol.

JAVIER SALVAGO

sábado, 13 de septiembre de 2008

LA SONRISA


Ha muerto una sonrisa en mi ventana;
¿no has visto a su alma levantar el vuelo?
Murió por tí, tendida sobre el hielo,
Cansada de esperar cada mañana.

Qué calidez, qué calidad humana
Exhibió en la antesala del recelo,
Sin permitir que el hondo desconsuelo
Oscureciera su ilusión temprana.

Asomóse a la noche hora tras hora
Con su visión de tí esperanzadora,
Y a la luz de la aurora se asomó.

Pero en la paz del campo mudo y triste
No se oyó tu pisada, no viniste,
Y dulcemente se desvaneció.

Francisco Alvarez Hidalgo

LO QUE YO QUIERO I


Quiero ser las dos niñas de tus ojos,
las metálicas cuerdas de tu voz,
el rubor de tu sien cuando meditas
y el origen tenaz de tu rubor.

Quiero ser esas manos invisibles
que manejan por sí la Creación,
y formar con tus sueños y los míos
otro mundo mejor para los dos.

Eres tu, providencia de mi vida,
mi sostén, mi refugio, mi caudal:
cual si fueras mi madre yo te amo...
¡y todavía más!

"Almafuerte"
Pedro B. Palacios

LO QUE YO QUIERO II


Tengo celos del sol, porque te besa
con sus labios de luz y de calor,
del jazmín tropical y del jilguero
que decoran y alegran tu balcón.

Mando yo que ni el aire te sonría:
ni los astros, ni el niño, ni la flor,
ni la Fe, ni el Amor, ni la Esperanza,
ni ninguno en lo eterno más que yo.

Eres tú, Soberana de mis noches,
mi constante, perpetuo cavilar:
ambiciono tu amor como la Gloria...
¡y todavía más!

"Almafuerte"
Pedro B. Palacios

LO QUE YO QUIERO III


Yo no quiero que alguno te consuele
si me mata la fuerza de tu amor...
¡si me matan los besos insaciables
fervorosos, ardientes que te doy!

Quiero yo que te invadan las tinieblas
cuando ya para mí no salga el sol.
Quiero yo que defiendas, mi cadáver
del más leve ritual profanador.

Quiero yo que me nombres y conjures
sobre labios y frente y corazón.
Quiero yo que sucumbas o enloquezcas...
¡loca, sí, muerta, sí, te quiero yo!

Mi querida, mi bien, mi soberana,
mi refugio, mi sueño, mi caudal,
mi laurel, mi ambición, mi santa madre...
¡y todavía más!

"Almafuerte"

Pedro B. Palacios

POEMA DOCE


la tristeza es una figura de humo
muy cierta por cierto
la tristeza es una niña vestida de otoño
un encuentro común aunque no la busco
la tristeza es un pedazo de cielo tras la ventana pequeña de una celda
es morir y no ver el triunfo.-
abril / 75

Carlos Aiub

OJOS-NIDOS


Para mi madre
Entre el espeso follaje
De una selva de pestañas
Hay dos nidos luminosos
Como dos flores fantásticas.
¡Nidos de negros fulgores!
¡De oscuras vibrantes llamas!

Y allá: dentro de esa selva
De follaje negro, espléndido,
En el fondo de esos nidos
Como flores de destellos,
¡Agita sus ígneas alas
El ave del Pensamiento!